Salamanca & Chelnov, the Atomic Runner.

Corría el año 1992, en ese tiempo vivía con mis padres y las zorras de mis hermanas todos juntitos bien apretujados, residiendo como allegados en la casa del borracho simpático de mi abuelo. Ellas, inocentes doncellas que compartían sus núbiles vivencias y esperanzas de forjar sus idílicos proyectos de vida (aspiraciones hueonas de mina, como casarse y tener hijos), ostentaban una deplorable red de contactos sociales. De esa red deseo destacar a una de las personalidades con las que circunstancialmente tuve que convivir en ese ambiente tan desfavorable, una señorita que se alojaba ciertos días en nuestro hogar y que compartía nuestra precaria condición. La denominada por todos como la "Jovy" (ahora me lo pregunto y no sé si ese era un apodo o un nombre, a estas alturas me importa una wea de gato), si mal no me acuerdo, trabajaba como educadora de párvulos. Un punto a destacar en todo esto es el hecho de que ustedes necesariamente deben sacarse de sus conciencias la benévola denotación mental de la parvularia rica, si bien la “Jovy” usaba la característica investidura profesional del rol de parvularia que consistía en el clásico delantal verdinegro con el cuello de tela blanca, su cara era una denigrante mezcla entre la insignia del Colo-Colo y el culo de un papión atropellado. Así, alejada de cualquier acepción de la palabra humanidad, siempre resultó ser una persona que a ratos me caía en muy bien (siempre y cuando no tuviera que mirarle la cara, por suerte era chico y me podía hacer fácilmente el hueón).

Llegado el momento, esta desaliñada mujer tomó la iniciativa de devolver la mano a la familia. Asumiendo que dejando un retrato como recuerdo en el velador de mis viejos no era una forma adecuada para agradecer todas las atenciones, ella decidió llevarse al príncipe de la casa a su pueblo natal, el nunca bien ponderado pueblo (culiao penca) de Salamanca, ubicado en la cuarta región. De esta forma ella contribuía a aligerar momentáneamente el ajetreo cotidiano de mi casa. Al desligarse mis padres por unas semanas el tener que alimentar a dos personas más, los pobres podrían tranquilamente repartir las raciones restantes de harina tostada entre los que quedaron en casa, haciendo aún más llevadera la convivencia familiar (aparte que yo era bien hincha weas, la Jovy sólo era una fea mujer).

Como ustedes han de imaginarse la iniciativa me afectaba directamente. Cuando se es niño chico uno no ha adquirido una carga vivencial que dé cierta capacidad básica para entramar una razón concisa y pertinente sobre ciertas cosas, forma de luego tener el juicio apropiado como para enunciar con propiedad una frase tan simple como: “¿por qué decirle no a un viaje fuera de la casa?”. Si sazonamos todo esto con la fructífera imaginación, ilusa e inocente con la que contaba cuando era yo pendejo, (¡puta weon en ese tiempo no había cable ni internet, que querís que hiciera!) tenía nublado todo prejuicio experencial sobre el pueblo feo ése. Un viaje era simple y llanamente eso, un viaje.

Sé que tal vez debí haber pensado en esas instancias el apelar al evidente racionamiento de que alguien debió engendrar a la Jovy, resultaba bastante obvio que aquél comistrajo de individuo debiera tener alguna ligadura genética con las típicas figuras mitológicas de los pueblos nortinos como lo son los orcos, los zerglings o algún paitoco extraviado medio cesante. Les juró que no lo pensé, pero tampoco estaba en condiciones psíquicas para hacerlo, maldita sea…
De esa forma terminé en el pueblo weon ese, rodeado por dos semanas de Salamanquinos (no sé como es el gentilicio de la gente weona esa), su mal olor era correlativo a su fisonomía, y éstas características eran correlativas a sus maneras de divertirse.

Por qué uno se acuerda tan re bien de las experiencias traumáticas. Como si fuera ayer vienen a mi mente los recuerdos dolorosos, como el instante aquel cuando obligado por las circunstancias compartí un pedazo de pan pelado (esas eran las golosinas de los Salamanquenses) con un niño morenito y feíto, al que le colgaban densamente una masa de mocos de la nariz y que alcanzaban a rozarle el labio superior, todo esto a orillas de una zanja en la que las personas alegres se bañaban sin cuestionarse más a fondo de donde provenían las turbias aguas que componían el improvisado balneario. Experiencias como esas en Salamanca tuve varias, pero no deseo extenderme más en destacar, a grandes rasgos, lo mal que lo pasé.
En una oportunidad junto con el grupo de mutantes sin poderes (la fealdad que yo sepa nunca ha sido una super-habilidad) que componían la familia de la “Jovy”, fuimos a lo que en ese momento denominaron “plaza de armas”. Se notaba el esmero que tal vez tuvo el equipo de gestión municipal por darle algo de dignidad a su centro cívico, ya que los tamarugos se encontraban estratégicamente colocados cerca de las banquetas de tal manera que cuando nos sentamos a comer pan pelado, había algo de sombra sobre nuestras ya acaloradas cabezas.

En ese momento algo despertó mi interés. Una pequeña caseta con barrotes rojizos y con las ventanas obscurecidas por la acumulación de polvo se erguía en una de las esquinas de la amorfa plazoleta. Esperé un instante de distracción para escabullirme, anhelaba con vehemencia saciar hasta entonces mi adormecida curiosidad. Por suerte la oportunidad se dio precisamente cuando de improviso apareció un organillero, al cual la gente se le acercaba no precisamente para disfrutar de la música que producía, al parecer llamaba más la atención el lastimero espectáculo que ofrecía el pobre viejo al exhibir un parche de gasa en el ojo derecho. Apenas mis cuidadores se aproximaron a señalar la hilera de pus y sangre que le brotaba al pobre músico bajo el remiendo que cubría su ojo, aproveché para escapar a ver que se escondía dentro de aquella llamativa estructura señalada anteriormente.

Mi sorpresa fue en extremo tremenda. Luego de prestarle algo de atención a un tipejo con una pinta de pandillero que estaba apostado detrás de un mostrador al interior del pequeño local, dirigí mi vista al fondo de la sala. No lo podía creer, ¡había una maquina de Arcade!, ¡Había un residuo de tecnología en ese apartado lugar ajeno a todo atisbo de contemporaneidad!. Me daba lo mismo si era el Pac-Man, el Rally X o el Chiller, me daba lo mismo. El simple hecho de ver una máquina de video juegos frente a mis ojos en esa cagá de pueblo había despertado en mí las mermadas ganas de vivir. Tenía que jugarlo, fuese como fuese, pero estaba sumido en una situación llena de contrariedades, ya que al momento de acércame a mis captores/anfitriones con el fin de sacarles cien pesos, corría el inminente peligro de tener que irme sin probar ese manjar tecnológico. Me acerqué al desarreglado locatario, aludiéndole que en cualquier momento llegaría mi mamá con dinero, y que de su parte le pedía que me diera un par de fichas. Después de unos incoherentes cuestionamientos relacionados con la fisonomía de mi madre (“¿oe huacho tu vieja eh rica?”), el tipo me creyó y finalmente accedió a darme un par de fichas. Estaba al borde de la gloria. Con el corazón acelerado me acerqué a la máquina con el fin de jugar la primera ficha.

Chelnov, the Atomic Runner.

Fue ahí cuando me percaté del título del juego, era el Chelnov the Atomic Runner de Data East. De esa empresa había ya probado otras (para esos años) maravillas, como el Bad Dudes Vs Dragon Ninja, el Karate Champ, Joe & Mac Caveman Ninja y el gran Capitain America and the Avengers, sólo por nombrar algunos títulos, de hecho Chelnov nunca lo había jugado antes. En ese momento metí la oxidada de ficha, me mandé la intro con las medias cinemáticas y me dispuse a manejar al culiao del Chelnov. Apretando fuertemente con la mano izquierda el mando de arcade de 8 movimientos, posicioné mi mano derecha sobre los 3 botones que se necesitan para jugar esta weá, uno para el disparo, otro para el salto y otro para cambiar de posición (mirar para adelante y mirar para atrás). El juego tiene un movimiento del scroll constante, es decir que la pantalla se mueve sola siempre hacia la derecha y el monicaco no para de correr a través de la etapa, mientras te aparecen monos feos que no tienen nada que envidiarle a los Salamanquenenses.

Cuesta en un principio acostumbrarse, pero el juego igual tiene su lógica, en especial con el hecho de querer devolverse. Con esto quiero destacar que a pesar que el personaje se pueda dar vuelta y quedar mirando para atrás, el weon siempre corre hacia la derecha de la pantalla, excepto cuando te agarras a coscachos con los jefes, que es ahí cuando se activa el movimiento hacia atrás y la pantalla deja de moverse por su cuenta. El hacer los cambios de movimiento (atrás/adelante) es uno de los aspectos más difíciles de dominar de este juego weon. Puedes necesariamente cambiar de posición en el aire, de tal forma de librarte de algún ataque que venga por Detroit, pero así descuidar el dónde vas a caer. En cuanto al apartado técnico, el movimiento del personaje, o sea la forma en que está hecha la animación del prota, está demasiado bien hecho, luego de ver correr a Chelnov te dan ganas de salir corriendo como los weones (es broma mierda!). Otro punto a destacar es que a lo largo de las etapas encuentras distintos tipos de armas, unas más mierdas que otras. Con respecto a esto, yo siempre me quedaba con el ataque básico, ya que al momento de agarrar los ítemes para aumentar el rango y la potencia del disparo, a final de cuentas el que resultaba mayormente beneficiado era la pistola de rayos amarillos con la que empiezas el juego.


La música y la estéti
ca del juego son sublimes. La tonadilla principal de las escenas es como para tararearla todo el día, adictiva como las mejores. En los ambientes de los escenarios y la forma de los enemigos, se puede visualizar una concepción artística que a grandes rasgos son una mezcla entre ruinas ancestrales y ciudadelas futuristas, todo un concepto particular terriblemente chorizo.


Finish.

A pesar de que la diversión en ese momento duró menos
que mi interés sexual por Gabriela Mistral (dado que está terrible muerta), ya que al rato tuve que volver a la choza de la Jovy, Chelnov fue uno de los juegos que automáticamente se quedaron engarzados en mi mente de jugador, porque aparte de ser un gran juego, en algún momento me salvó la existencia. Es por eso que mi más sincera recomendación (o más bien exigencia) es la siguiente, ¡Juéguenlo hijos de puta!. Tal vez al jugarlo puedan llegar a sentir en una ínfima medida la misma emoción que sentí yo al momento de jugar esta wea de juego por primera vez.





Se despide de ustedes hasta una próxima oportunidad
Onel, el cazurro.

24 cibercariñosos comentarios:

Anónimo dijo...

eeeeeeeeeeeeeeee, por fin una wea.
Frase pal bronce: "En una oportunidad junto con el grupo de mutantes sin poderes (la fealdad que yo sepa nunca ha sido una super-habilidad)”.

Teleweonetas aaAAaa
Teleweonetas uuUUuu
Al juako le gusta aaAAaa
mucho la corneta uuUUuu

Jack Black dijo...

Pta, al fin una wea decente, digna de leer po wn ...

Anónimo dijo...

Mis felicitaciones al que puso el paquetón ruso en el nombre de telemarionetas.

Ken dijo...

True strength is something money and credit cards cannot buy!

Ryu dijo...

"You did quite well, but you need more training to defeat me."

anónimo dijo...

sueño con ovnis,
con extraterrestres
ellos vienen a buscarme
a corroborar que fracase

Y yo por mi parte
nada puedo hacer
no me puedo ni mover
no puedo ni gritar

porque

sueño con ovnis,
con extraterrestres
ellos vienen a buscarme
a corroborar que fracase

Y yo por mi parte
nada puedo hacer
No me puedo ni mover
no puedo ni gritar

Anónimo dijo...

Tele con E

Mario con O

Telemarionetas
chupamela la corneta

Y el publico grita:
MAS CHUCHA'S¡¡¡¡¡¡¡

Anónimo dijo...

quiten la opción de anónimo para que weetasos como el último no tengan cancha.
Por favor.

Anónimo dijo...

chúpala con mostasilla!

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=slY9Xkk6v10&feature=PlayList&p=2319964248C9D3B2&playnext=1&playnext_from=PL&index=73

Uh! Ah! dijo...

Tengo mi funny pinga for your little chichachicha
te voy a romper bobo si tu tocas mi minita
ella viene del estero trayendo su perfume nuevo
tengo el vudu sureño, tengo el sendero de tus sueños... sueños

Jennifer Lopez...(nanana)
entro a mi casa...(nanana)
abrio la heladera
puso su culo junto a las cerezas
la cual yo comere
la proxima primavera
yo creo en Dios
pero es ella quien cura mis penas

Anónimo dijo...

She got girls
Girls all over the world
She got men
Every now and then
But she can't make up her mind
On just how to fill her time
But the only way she can unwind

Chorus
A.C. D.C.
She's got some other lover as well as me
A.C. D.C.
She's got some other women as well as me
She's got some other women as well as me

She's got funk
But they call her a punk
She got zing
You ought'a see her dingaling
Well let's be in it together
'Cause she'll be in it forever
You've got to take it now or never

Chorus

A.C. D.C.
She's got some other woman as well as me
A.C. D.C.
Some other woman as well as me
A.C. D.C.
Some other woman as well as me...

Anónimo dijo...

clap
clap
CLAP

Simon dijo...

papelucho en el desierto

Onel dijo...

Ya entonces ahora que el otro par de weones se den la molestia de hacer una entrada o cierran la wea de blog de una vez por todas. Me latean los rumores de pasillo.

Anónimo dijo...

F5 !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

k-ro dijo...

EH OK, POR PRIMERA VEZ EN LA HISTORIA LEI UNA GUEA ENTERA, NO SE QUE DECIR, PERO YO CACHO QIE LA JOVI LA LLEVA

el comentario del pasado dijo...

puta la wea po, no se me ocurre ni una wea tan amorfa como la tuya, por la chucha picachu todo esto es para decir que estuvo bacan la entrada, elflower la lleva este verano, tanto asi como mi sobrino el tetitas de trompo.

Jovi dijo...

Maricón ctm, la primera teta fue que agarraste fue la espinilla que tenía en el quinto rollo superior izquierdo y me venis a pelar, pendejo wn rqliao.

Onel dijo...

mis más sinceras disculpas Jovy, no podía dejar de compartir con los demás las cosas "pintorescas" de la vida.
JUAKO WEON ACTUALIZA!

Anonimo dijo...

aka salen las pornos que ve el angryfreak

http://drcaos.elbruto.es

Anónimo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=X1WmQNrmsVs&feature=channel_page

Anónimo dijo...

puta la wea murio kurt cobain!

almendra dijo...

Saludos onel! :)